¿Alguna vez te has preguntado como concibe un niño ciego el mundo?
Es obvio que muy distinto a nuestra manera de percibirlo.Los bebés con esta discapacidad le otorgan significados a esa otra realidad y lo imaginan de un modo especial.
Existen claras diferencias entre un bebé ciego y uno que si logra observar su alrededor, en el caso de este último estará en las condiciones de utilizar todos sus sentidos: conocer distancias, relacionar o diferenciar objetos, en general tendrá una gama de posibilidades en su descubrimiento del mundo.
La ceguera de nacimiento también es distinta a la adquirida en una etapa posterior. Los adultos ciegos ya conocen su entorno, saben comos son los colores, la forma exacta de los objetos o la apariencia de una persona; en cambio, los bebés ciegos necesitan ser estimulados con técnicas sencillas y así poco a poco comenzará a relacionar las situaciones
Es importante que en familias con niños ciegos exista el compromiso de enseñarles a interactuar con sus iguales a pesar de su discapacidad física.
Un bebé ciego reconoce a las personas por los sonidos que producen
Es necesario saber que en los primeros meses de vida, el desarrollo de un niño ciego es similar al de un vidente. A partir del cuarto mes de vida, las diferencias son más evidentes. Para un bebé ciego, las personas existen a través de los sonidos que producen. Entre los 7 y 9 meses, el bebé ciego comienza a buscar objetos que ya conocen. Y entre los 9 y 12 meses, saben buscar el objeto en el sitio que lo dejó.
En cuanto al desarrollo postural y motor de los bebés ciegos suele ser casi igual que el de los videntes. Sólo se retrasa el gateo que es entre los 12 y 13 meses, y el caminar hasta los 19 meses. El lenguaje adquiere un papel fundamental en el niño invidente, principalmente para acceder a operaciones concretas. Si un niño ciego no recibe afecto ni estimulación ambiental, puede convertirse en un niño pasivo, incapaz de enfrentarse de acuerdo con las situaciones ambientales, se sentirá inferior, y deficiente cuanto a su imagen corporal.
Aspectos del desarrollo en niños ciegos
La sensibilidad cutánea, la capacidad del tacto, y la audición son capacidades que se debe estimular y desarrollar por un niño ciego. A través de esas sensaciones, el niño podrá conocer su espacio. El oído, por ejemplo, permite al niño diferenciar sonidos, localizar y detectar obstáculos e identificar personas y objetos. En cuanto a los sentidos químicos, el gusto y olfato, no existen estudios relacionados. La educación de un bebé ciego tiene como objetivo conseguir su maduración y desarrollo de acuerdo con sus posibilidades.
El papel de los padres es importante. Deben considerar que:
- Deben fomentar la exploración del bebé de las distintas partes de su cuerpo.
- No deben impedir la actividad motriz por miedo a las caídas.
- El desarrollo del tacto y el oído es importante para que el niño perciba los sonidos y descubra de donde proceden.
- Deben fomentar los comportamientos preverbales del bebé (la sonrisa, el llanto...).
- Deben estimular la exploración del entorno, asignando palabras a los objetos.
- Deben ayudar al niño a desarrollar actividades de la vida diaria como coger el biberón, el chupete, utilizar los cubiertos, vestirse y desvestirse solo, indicar cuando se orine, etc.
He publicado esta entrada porque me parece interesante conocer el desarrollo evolutivo que tienen los niños con discapacidad visual y cómo debemos ayudarles tanto desde el colegio como desde casa y sobre todo a intentar ponernos en su lugar y ver qué es lo que ellos sienten a lo largo de toda su vida.